Mañana sábado, sobre las 17.00 horas, tendrá lugar la Bajada de la Rama desde la Montaña de Vergara, en las medianías, y el domingo, a partir del mediodía, se celebrará la tradicional Romería
El municipio vivirá este fin de semana la tradicional Fiesta de Las Marías en honor a La Virgen de Guía, una celebración que este año tiene una significación especial al cumplirse los 200 años de la promesa que se hizo a la Patrona, en la Montaña de Vergara, si liberaba a la zona Norte de la Isla de la plaga de langostas que asolaba sus cosechas. Esta fiesta votiva, organizada por los Mayordomos de Las Marías, fue declarada Bien de Interés Cultural en el año 2009.
Mañana sábado, 18 de septiembre, a partir de las 12 horas tendrá lugar el anuncio de las fiestas mediante el repique de campanas y el lanzamiento de voladores, todo ello acompañado de los toques tradicionales de las caracolas y tambores.
Poco después, sobre las 15:30 horas, tendrá lugar la salida en guagua desde la Avenida de la Juventud (en el casco) hacia la Montaña de Vergara, en las medianías, con todas aquellas personas que deseen participar en la Bajada de La Rama.
Alrededor de las cinco de la tarde, una vez llegados a Vergara y junto a todos los vecinos de los pagos y caseríos que han bajado hasta este punto de encuentro desde la zona Alta y las Medianías del municipio, los romeros partirán portando ramas y bajarán hasta el pórtico de la Iglesia al ritmo de las caracolas, tambores y cajas de guerra para bailar y ofrecer la rama a Nuestra Señora La Virgen de Guía.
La Virgen sube al encuentro de los romeros
Este año, con motivo del 200 aniversario de esta celebración, se subirá a La Virgen desde la Iglesia Matriz hasta la Plaza de San Roque acompañada de la “Banda de Guerra n.1 de la Brigada de Infantería” con bombos, cajas de guerra y tambores, para recibir a los romeros que bailarán ante ella y le ofrecerán las ramas portadas.
A continuación se bajará hasta el pórtico de la Iglesia Matriz donde los romeros y el ruido atronador de las caracolas y los tambores, como símbolo de alegría y regocijo ante La Virgen, se convertirán nuevamente en uno de los momentos más intensos y emblemáticos de esta celebración.
La fiesta continuará al día siguiente, domingo 18, con la tradicional Romería, una de las mejor conservadas de la Isla, que dará comienzo sobre las doce del mediodía con la participación de carretas, caballos enjaezados, agrupaciones folklóricas, rondallas y parrandas que durante varias horas pasarán ante la imagen de La Virgen ofreciéndole sus muestras de fe y devoción.
Origen de esta Fiesta
“Hace casi dos siglos ya, pues sucedió en el año 1811, los vecinos de los Altos ofrecieron esta fiesta votiva a la Virgen de Santa María de Guía, en franco agradecimiento por haber salvado sus tierras y cosechas del azote de la cigarra que habría de hundirlos en la miseria y en la más negra desesperación.
Este voto se hizo en la Montaña de Vergara, de rodillas, llorando ante el desastre inminente. Todos se postraron a la vista de las torres del Santuario de la Virgen, con los ojos clavados en una esperanza que sólo la Fe les hacía tangible. Y la Virgen les oyó. De allí a pocos instantes, vieron unas nubes que subían barranco arriba desde el mar y que al llegar sobre las tierras que gemían bajo el castigo de la plaga, descargó en lluvia torrencial arrasando en pocos momentos la cigarra y alejando en forma tan milagrosa la devastación y la ruina que se cernía sobre sus heredades y sobre toda aquella comarca.
Allí mismo, encima de la tierra redimida del castigo, ofrecieron los más viejos – en sus nombres y en los de todos los que de sus sangres de allí en adelante le sucedieren,- llevar cada año a la Santísima Virgen de Guía la ofrenda de sus terrazgos y el fruto de sus trabajos y afanes.
Desde entonces, cada año, se ha venido celebrando ininterrumpidamente esta fiesta, una de las más hermosas y profundamente populares que en nuestra tierra ofrece la tradición y la Fe. Las generaciones actuales quieren incrementar esos sentimientos de gratitud y devoción a la Santísima Virgen y, en este año, a través del tiempo, se harán presentes con fuerza nueva todos los descendientes de aquellos que hace ya casi doscientos años, ofrecieron a la Virgen este homenaje eterno en unión del pueblo de Guía, en la realización del voto aquél, voto que está hecho de Fe, de Esperanza y de Amor a Nuestra Patrona la Virgen de Guía”.